Gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Pozoblanco iniciamos el proyecto “+ San@ que una manzana” en el Centro de día para personas mayores de Pozoblanco. Este proyecto tiene el objetivo de mantener y mejorar la salud incidiendo en la alimentación y la actividad física, previniendo enfermedades ligadas a una alimentación desequilibrada, conservando la autonomía y funcionalidad mediante el aprendizaje de hábitos saludables, higiene postural y vida activa.

Desde un punto de vista fisiológico, la principal característica del envejecimiento es la pérdida progresiva de masa corporal magra. La reducción de masa muscular conlleva una disminución de la tasa del metabolismo basal. Del mismo modo, el descenso de la actividad física también conduce a una disminución del gasto energético del organismo. Por tanto, la dieta de la persona debe aportar algo menos de energía para evitar situaciones de sobrepeso. Por su parte, el sistema óseo también se altera, ya que se produce una disminución de la densidad mineral ósea, especialmente en mujeres, lo que conlleva un mayor riesgo de osteoporosis y, en consecuencia, de fractura. El paso de los años también conlleva que todas las reacciones que forman parte del metabolismo, se ralenticen, destacando la disminución de la tolerancia a la glucosa, que puede dar lugar al aumento de la glucemia con sus negativas consecuencias. Esta alteración puede deberse a una disminución en la producción de insulina por parte del páncreas o una menor respuesta en los tejidos a dicha hormona. Además, pueden estar implicados factores dietéticos y la disminución del ejercicio físico.

En esta etapa de la vida también se produce una disminución gradual de la cantidad y calidad de las secreciones digestivas (debida al declive de la función secretora de algunas de las glándulas implicadas en la digestión) lo que entorpece el proceso digestivo. Este hecho, junto a que también se atrofia la mucosa intestinal, conduce a una peor absorción y, por tanto, a un menor aprovechamiento de ciertos nutrientes, especialmente proteínas, vitaminas y minerales.

Otro de los trastornos que frecuentemente afecta a la persona de edad avanzada es el estreñimiento, motivado principalmente por la disminución de la motilidad intestinal, que en muchas ocasiones se agrava por la falta de una rutina de ejercicio físico y una cantidad insuficiente de fibra en la dieta.

La dieta en la tercera edad debe ser variada, equilibrada, completa y suficiente. Es recomendable que la comida sea agradable al paladar y que se distribuya en 5 o 6 tomas durante todo el día, fundamentalmente en quienes muestran inapetencia.

Por todo ello, una vez que este programa finalice en octubre, pasará a formar parte de la programación diaria del centro, ya que se considera de suma importancia, dado que integra dos perspectivas fundamentales que inciden directamente sobre la calidad de vida de la persona: la nutrición y el ejercicio físico.

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