El despliegue del recién aprobado IV Plan estratégico de PRODE está motivando importantes cambios de carácter organizativo y estructural que suscitarán efectos a diferentes niveles, contribuyendo a su transformación en una organización más ágil y eficiente y, lo más importante, se refuerza la participación y el empoderamiento de las personas para acentuar su rol de indiscutibles protagonistas.
Esta metamorfosis está conduciendo a una nueva forma de pensar, de planificar y de hacer, cuya consecuencia inmediata traerá consigo cambios en los actuales modelos que orientan las prácticas profesionales, poniendo el foco en las respuestas que han de darse a las aspiraciones y deseos de cada persona.
Si algo caracteriza a PRODE es su preocupación por generar empleo a personas con discapacidad y contribuir a evitar situaciones de exclusión y pobreza que tanto atenazan a esta colectividad. Pero dentro de este grupo se halla otro segmento de población que sufre aún más dificultades para alcanzar la tan ansiada inclusión a través del empleo. Se trata de las personas con discapacidad intelectual y/o del desarrollo.
Siendo conscientes de esta situación, acaba de crearse una nueva estructura dentro de PRODE desde la que se desarrollará toda una estrategia para diseñar y gestionar acciones de formación y orientación necesarias para alcanzar la meta del empleo. Esta nueva estructura dotada de recursos de diverso corte ha conformado el Área sociolaboral, que surge con el doble propósito de implantar un nuevo Modelo de formación, ocupación y empleo en el contexto de la Entidad y, también, de diseñar un Servicio de vida independiente en el ámbito de vivienda. Todo ello para dar un salto cualitativo hacia la inclusión social efectiva de las personas con discapacidad intelectual, dado que al disponer de un empleo digno y poder contar con los apoyos necesarios para vivir de forma independiente se allana el terreno para que cada sujeto logre sus metas personales y pueda gozar de una vida plena.
Por tanto, no es casualidad que haya visto la luz Yosíquesé Coffee & Food, una nueva iniciativa en el sector de la hostelería que pretende seguir sumando puestos de trabajo destinados a personas con discapacidad. Pero, además, este establecimiento nace bajo la concepción anteriormente expuesta de atender demandas personales y su principal valor radica en que se va a instituir en un dispositivo de formación y desarrollo personal orientado hacia la inserción sociolaboral de las personas con discapacidad intelectual. La apertura de este café-bar junto a la configuración de un equipo de profesionales son los primeros pasos de este ambicioso proyecto cuyo objeto es el de facilitar apoyos personales para generar oportunidades reales de inclusión.
En definitiva, se abre una nueva etapa en la que esta Entidad seguirá haciendo un importante esfuerzo para seguir emprendiendo y generar proyectos bajo el paraguas de este nuevo modelo que apuesta por un planteamiento mixto, al integrar estrategias de corte social y de empleo (ocupacional/formación/empleo) para generar oportunidades a las personas con discapacidad intelectual y/o del desarrollo. Con todo ello se contribuye a proporcionar coherencia y contribuir a la consecución de la nueva misión de PRODE que aboga por: Mejorar la calidad de vida de cada persona con discapacidad intelectual, promover la inserción laboral de personas con discapacidad, y que dispongan de las mismas oportunidades que el resto de ciudadanos.
