Tal y como comentábamos en la entrada de ayer, en lo sucesivo, de forma cotidiana comenzaremos a leer, hablar, escuchar y utilizar con familiaridad el término “Plena Inclusión”, y ello obedece a la materialización de una reivindicación de las propias personas con discapacidad intelectual. Desde octubre, la denominación “Plena Inclusión” ha comenzado a reemplazar al nombre de “FEAPS” que ha sido utilizado durante más de 5 décadas para designar a la Confederación Española de Organizaciones a favor de las Personas con Discapacidad Intelectual, a la que pertenece PRODE. Este cambio comenzó a fraguarse, como se ha informado, a partir de una propuesta realizada por personas con discapacidad intelectual en el Congreso celebrado en la ciudad de Toledo en 2010 (“Toledo 10”) y acaba de materializarse ahora.

Nuevo logotipo de FEAPS, ahora «Plena Inclusión», de la que PRODE forma parte

La nueva denominación es un término fácil de decir y recordar, posee connotaciones positivas y explicita directamente la misión de la Organización. Aparejado al nombre, suscita gran interés un nuevo logotipo representado por este trébol de cuatro hojas y diferentes tonalidades de verde. La motivación que ha dado lugar a este logo es la de establecer un paralelismo entre las personas con discapacidad y esta variedad de trébol que es diferente a las demás pero tiene evocaciones positivas por estar asociado a la buena suerte. Uno de los pétalos del trébol es más grande, diferente a los otros tres, pero encaja perfectamente con los demás, como las personas con discapacidad pueden hacerlo en la sociedad de forma armónica cuando han conseguido su plena inclusión.

En definitiva, esta nueva imagen ilustra el tránsito hacia una nueva etapa en la que la persona con discapacidad es la que conduce su propia vida y donde la comunidad de pertenencia, junto a las personas más allegadas de su entorno, tienen la importante función de dispensar apoyos significativos que le orienten hacia la plena inclusión y alcanzar una verdadera ciudadanía.